Si has sufrido un accidente y presentaste un reclamo, tarde o temprano tendrás que tratar con un ajustador de seguros. Aunque puedan parecer amables y comprensivos, recuerda que su trabajo es proteger los intereses de la compañía de seguros, no los tuyos. Es fundamental saber cómo manejar estas interacciones para no comprometer tu caso.
1. No Firmes Nada Sin Consultar a un Abogado
Uno de los errores más comunes que cometen las víctimas de accidentes es firmar acuerdos sin comprender completamente sus implicaciones. Los ajustadores pueden ofrecerte un acuerdo rápido, pero este suele ser mucho menor de lo que realmente mereces. Antes de aceptar cualquier oferta o firmar documentos, consulta con un abogado especializado en lesiones personales.
2. Ten Cuidado con lo que Dices
Todo lo que le digas a un ajustador de seguros puede ser usado en tu contra. Ellos pueden hacer preguntas diseñadas para minimizar la responsabilidad de su aseguradora. Algunas recomendaciones clave incluyen:
- No admitir culpa ni hacer suposiciones sobre el accidente.
- No dar declaraciones grabadas sin la presencia de un abogado.
- Mantener respuestas breves y objetivas.
Según Nolo, lo mejor es dejar que tu abogado maneje la comunicación con la aseguradora para evitar malentendidos o manipulaciones.
3. No Aceptes la Primera Oferta
Las aseguradoras suelen hacer ofertas iniciales bajas esperando que las víctimas acepten rápidamente. Estas ofertas rara vez cubren todos los daños, como gastos médicos a largo plazo, pérdida de ingresos y dolor y sufrimiento. Es importante evaluar el impacto total del accidente antes de aceptar cualquier compensación.
4. Conoce Tus Derechos
Los ajustadores pueden insinuar que no tienes derecho a ciertas compensaciones o que es difícil probar tu caso. Sin embargo, muchas veces esto no es cierto. De acuerdo con OAS Inc., es clave contar con asesoría legal para asegurar que recibas la compensación justa que te corresponde.
